El artículo "Internals" se publicó en la página web de Slanted Flying con el permiso del autor Sam Langley de su blog personal.
¿Qué hace que el Tai Chi sea un arte interno? La mayoría de los libros sobre el tema dicen que tiene algo que ver con la energía y la mente. Si bien puede haber algo de verdad en esto, no ayuda mucho a un principiante.
El Tai Chi es interno en un sentido muy físico. Cuando uno alinea su esqueleto de una manera específica y relaja sus músculos, se activará su tejido conectivo interno o fascia. En la mayoría de las personas este fortalecimiento interno es inicialmente un trabajo duro, ya que está ejercitando partes más profundas de su anatomía que probablemente estén bastante débiles.
La fascia se conoce como músculos posturales, que es una definición útil porque la fascia es lo que te permite estar de pie. Es el tejido conectivo que une los músculos a los huesos y recorre todo el cuerpo. Es muy importante mantener sana la fascia, pero la mayoría de las formas de ejercicio físico no lo hacen. Solo puedes fortalecerla relajándote. Levantar pesas y hacer flexiones puede tener algún propósito, pero este tipo de ejercicios externos dificultará cualquier tipo de trabajo interno.
La razón por la que se enfatiza la relajación por encima de todo en el Tai Chi es por esta razón. La mayoría de las personas están bastante tensas y las que van al gimnasio con regularidad probablemente estén aún más tensas. Parece que cuando ejercitas demasiado tus grandes grupos musculares lo estás haciendo a expensas de la fuerza interna.
El Tai Chi es un arte marcial que busca entrenar la fuerza de todo el cuerpo. Eventualmente, también procura fortalecer tus músculos, pero poner demasiado énfasis en ese tipo de entrenamientos, al principio dificultaría mucho el progreso.
El Tai Chi desarrolla una profunda conexión interna del cuerpo. Cuando me muevo puedo sentir la
conexión entre mi mano y mi pie. Esto comienza como una idea, se convierte en una sensación débil y posteriormente se convierte en una realidad física profunda. Cuando comienzas a desarrollar esta sensación, la práctica de Tai Chi se vuelve mucho más satisfactoria.
Publicado el 11 de marzo de 2020 por Sam Langley en Filosofía, Formación